Que su belleza no te engañe. Además de ser hermosas a la vista y adornar la mesa con sus brillantes colores y exóticas formas, las flores pueden resultar todo un manjar pues también las hay comestibles. No solo son deliciosas, sino también versátiles pues a la hora de cocinar con ellas y hacen que los platos se vean más bonitos.
Un ejemplo es la flor de calabaza, que bien podemos comerla en sopa o quesadillas pero también rellenas son excelentes; las ensaladas se enaltecen cuando tienen entre sus ingredientes como la capuchina —la flor del mastuerzo— que les da un toque picante y otras como la de jamaica, que quedan muy sabrosas con un poco de limón dentro de un buen taco.
Para que se animen a comer más y más flores, les compartimos tres recetas para que las preparen y adornen su mesa con ellas pero en grandiosos platillos.
La flor de calabaza sirve para hacer muchos platillos. Si además las consiguen pegadas a la calabaza hagan esta receta no sólo quedara sabrosa sino que será muy lucidora.
Cocinar a fuego bajo la cebolla con un poco de aceite de oliva hasta que esté suave y mezclar en un recipiente junto con el queso de cabra, rellenar las flores previamente lavadas y cerrarlas como si fueran un caramelo.
Revolver los huevos y salpimentar, pasar las flores por el huevo y después por el pan. En una sartén freír las flores, hasta que el empanizado esté bien crujiente, y servir.
La capuchina o mastuerzo, tiene un sabor picante que da un sabor muy peculiar a las ensaladas y es perfecta para darle un toque diferente a nuestras comidas
En una sartén a fuego bajo cocinar el tocino hasta que quede bien crocante, reservar y remover el exceso de grasa.
Cortar la cebolla en medias lunas y en un plato ponerlas con sal por 15 minutos, (asíeliminamos el sabor fuerte que tienen) escurrirlas.
En un recipiente poner la lechuga, cebolla, tocino y flores de capuchina, aderezar con el aceite y vinagre, siguiendo la regla que por una medida de vinagre se ponen tres de aceite.
Poner a hervir las flores hasta que tomen una textura suave, sacar del agua (la cual después pueden aprovechar para hacer una agua de jamaica), llevar las flores a un sartén con un poco de aceite y ponerle la misma cantidad de sal y azúcar, agregarle el jugo de 1 limón y probar el nivel de acidez y, en caso de ser necesario ajustar. Su sabor puede llegar a ser medio amargo y eso lo pueden ajustar con la cantidad de azúcar que le agreguen, pero cuidado la receta no debe ser dulce.
Calentar unas tortillas y a disfrutar una rica opción vegetariana y relamen sana. Lo pueden acompañar con un poco de crema acida queda de chuparse los dedos.