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#50SaboresMexicanos Perfumada y dulce, la deliciosa naranja

Por Mariana Toledano

De nueve a once jugosos gajos de sabor dulce y ácido forman un fruto de piel naranja muy brillante y por demás aromático. Acompañado de blancas flores de azahar perfumadas, la naranja es una de las frutas mas apreciadas por los mexicanos.

El árbol del naranjo es originario de Asia y su cultivo es muy antiguo. Las primeras naranjas dulces llegaron a Europa introducidas por portugueses desde la India durante el siglo XVI,  y fueron traídas a América en el segundo viaje de Cristobal Colón.

El nombre de la naranja proviene del árabe naranch, y del persa narang, que significa “perfume interior”, aunque en Latín fue llamada “aurantia” por su color semejante al oro.

De acuerdo con el SIAP (Sistema de Información Agroalimentaria y Pesquera), nuestro país es el cuarto productor de naranjas a nivel mundial.

La naranja, digna de cualquier platillo

Esta fruta se cultiva principalmente en los estados donde el clima tropical favorece el crecimiento de los naranjos, tales como Tamaulipas, San Luis Potosí, Nuevo León, Yucatán, Hidalgo, Oaxaca, Tabasco, Chiapas, Colima y Veracruz, siendo este último el líder en producción con 2.1 millones de toneladas —más de la mitad del total nacional—.

En la última década, la producción de naranja se ha mantenido entre 3.8 y 4.3 millones de toneladas, lo que significa que se cultivan al año cerca de 38.3 kilos por cada mexicano.

En México, se cultivan principalmente tres variedades de naranja. La valenciana, que al ser muy dulce es destinada principalmente a la producción de jugos y comienza a trabajarse en mayo.

La naranja navel-lane-late que por su grado de acidez se emplea con mayor frecuencia en la mesa y se produce a partir de febrero, y la navelina que es utilizada tanto en la mesa como en la elaboración de jugos, su producción es muy alta y comienza en diciembre.

La naranja se puede comer entera, espolvoreada con un poco de chile es riquísima. También se disfruta en jugos, aunque la repostería y la mexicana le guardan un lugar muy especial.

Esta fruta es pieza clave de la cochinita pibil, el pan de muerto, los dulces cristalizados y el sencillo pero inolvidable panqué de naranja. Puede usarse lo mismo en preparaciones saladas, en guisos con carne, pollo o pescado en ensaladas y cocteles de frutas; que en tartas, mermeladas y conservas.

En inglés: orange En francés: orange

Te compartimos la receta del panqué de naranja que, acompañado de una buena taza de café, puede alegrarle la vida a cualquiera.

Ingredientes

  • 2 tazas de harina blanca de trigo
  • 2 cucharaditas de polvo para hornear
  • 1/2 cucharadita de sal
  • 1 taza de azúcar blanca
  • 2 huevos
  • 1 cucharada de ralladura de naranja
  • 1/4 taza de azúcar blanca
  • 1/2 taza de nuez de castilla picada (opcional)
  • 1/2 taza de mantequilla
  • 1 taza de jugo de naranja fresco

Procedimiento

  1. Precalentar el horno a 175 grados C. Engrasar un molde para panqué de 23 x 13 centímetros. Mezclar la harina, el polvo para hornear, la sal y las nueces.
  2. Batir en un refractario aparte la mantequilla con una taza de azúcar. Sin dejar de batir, agregar uno a uno los huevos. Apagar la batidora y añadir ralladura de naranja y 1/2 taza de jugo, mezclar. Agregar los polvos y mover con una espátula hasta que se hayan humedecido.
  3. Vertir la masa dentro del molde engrasado y hornear durante una hora o hasta que el palillo salga limpio. Retirar el panqué del horno.
  4. Mezclar el resto del jugo de naranja con 1/4 taza de azúcar en una cacerola pequeña. Calentar y revolver hasta disolver el azúcar. Verter poco a poco este glaseado sobre el panqué caliente. Dejar el panqué dentro del molde por 10 minutos más, luego desmoldar y esperar a que se enfríe por completo.