Deberíamos cocinar lentejas todo el tiempo. Estas brillantes leguminosas además de ser saludables pueden ser deliciosas en un sinfín de recetas que no cansan, desde sopas, ensaladas y guarniciones. Eso sí, para fomentar el amor por ellas es necesario tomarles el modo.
Es importante comprar las más frescas que puedas encontrar, así podrás usarlas durante más tiempo. Regularmente, las más viejas tardan más tiempo en cocinarse y su piel tiende a desprenderse durante la cocción.
Además, si eres exigente en la presentación de tus platillos, las que no son tan tiernas tienen pequeñas manchas blancas donde la lenteja comenzó a brotar, son sabrosas y completamente comestibles, pero no son dignas de una bella presentación.
y estos cuatro pasos son básicos y obligatorios:
Es cierto, puedes cocinar las lentejas sin haberlas remojado antes, pero tardarán mucho más tiempo en estar listas. Colócalas en un tazón grande y cúbrelas con mucha agua fría.
Déjalas mínimo cuatro horas y máximo 12, aunque lo mejor es ponerlas antes de irte a dormir para que cuando despiertes ya estén bien hidratadas y listas para cocinar.
Lo primero que tienes que hacer es enjaguar y escurrir las lentejas. Colócalas en un colador y retira las que tengan mala apariencia. Enjuaga muy bien, pero delicadamente, con agua para retirar residuos de tierra.
Lleva las lentejas ya enjuagadas a una cacerola y vierte el agua. Si deseas condimentarlas con hierbas aromáticas ahora es el momento, la sal debes dejarla para después.
Empieza a cocinar a fuego medio alto hasta que el agua hierva y reduce el fuego para mantener una cocción a fuego lento muy suave. Solo deberías ver algunas burbujas pequeñas y un ligero movimiento en las lentejas.
Cocina las lentejas sin tapar de 20 a 30 minutos (o más, si es necesario). Agrega agua según sea necesario para asegurarte de que apenas estén cubiertas. Agrega sal.
Estarán cocinadas tan pronto como estén tiernas y no crujientes pero ojo: más viejas pueden tomar más tiempo para cocinarse y arrojar sus pieles externas a medida que se cocinan.
¿Ya están listas? Cuela y remueve la hoja de laurel si la usaste. Regresa las lentejas a una sartén y agrega 1/4 de cucharadita de sal. Prueba y agrega más según sea necesario.
Ya que las lentejas están cocidas puedes refrigerarlas máximo una semana. Puedes comerlas solas y sazonarlas con aceite de oliva, jugo de limón, vinagre y hierbas frescas o incorporarlas a sopas, ensaladas y otras recetas.
Más sencilla, imposible. Lo único que necesitas cocinar son las lentejas. Aquí encuentras la receta.
Ingredientes
Triturar todos los ingredientes salvo la granada y salpimentar. Servir con granos de granada por encima y un chorrito de aceite de oliva y la cucharadita restante de sésamo.
El restaurante Flor de Viento nos comparte una receta para que prepares un wok de lentejas con atún.
Ingredientes (para 4-6 personas)
Saltear las cebollas y los ajos en una sartén con un poco de aceite de oliva durante 15 minutos a fuego bajo. Añadir el tomate, salpimentar y cocinar un par de minutos. Sumar el caldo, llevarlo a ebullición y bajar el fuego. Añadir la calabaza y un poco de tomillo y cocer 15 minutos.
Incorporar las lentejas y las setas y cocinar por 5 minutos más, o hasta que las setas estén tiernas. Sazonar con sal y espolvorear queso por encima. Servir.
Esta es sin duda una variación para comer esta leguminosa tan benéfica para nuestro organismo y no podrán negar que la presentación es muy linda.
Ingredientes (para 4 personas)
Remojar las pasas con el vinagre. Cortar en rodajas los puerros y cocinarlos en una sartén con un chorro de aceite a fuego medio. Salpimentar y añadir las pasas. Mezclar en un tazón la salsa de soya, el vinagre y el azúcar.
Cuando el puerro esté listo añadir las legumbres, la salsa anterior y saltear a fuego medio durante un minuto. Sazonar con sal, espolvorear con perejil picado y servir.
Si tuviéramos que enumerar las delicias que el mar ofrece, el pulpo forzosamente estaría en nuestro top cinco. Bien preparado, este cefalópodo es un bocado de cielo y más si se combina con lentejas.