¡Basta ya de bolsitas de cacahuates y ardua búsqueda de comida sana y económica para alimentarnos todos los días! Con un poco de organización puedes evitar “comer lo que sea” por falta de tiempo.
Un meal prep consiste en la planificación y elaboración de menús semanales para tener listo lo que comerás gozando de los beneficios de comer más saludable, y ahorrar tiempo y dinero.
Una de las partes más importantes del plan de comidas semanal es la rutina de preparación durante el día que sea asignado, de preferencia un día con pocas actividades para dedicarle tiempo a cocinar, cocinar, cocinar. Pasar algunas horas en la cocina picando y cortando significa que tendrás comida lista mucho más fácil durante los los próximos días.
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Además de contenedores y tiempo para la preparación de tus comidas, te sugerimos estos 6 alimentos que además de saludables y ricos te ahorrarán tiempo y algunos centavos también.
Cerdo a cocción lenta
El hombro de cerdo es un corte de carne muy asequible que se cocina mejor cuando su cocción es lenta y a fuego bajo. Lo mejor de esta carne es que se conserva de maravilla dentro del congelador en bolsas selladas al vacío o simplemente sacando la mayor cantidad de aire posible de la bolsa.
De está manera podrás utilizar cuando quieras, unos taquitos de hombro de cerdo, una ensalada con champiñones y arúgula, o un simple pero sustancioso sándwich son solo algunas ideas.
Caldo de pollo
El caldito de pollo es omnipresente en la cocina mexicana -está en nuestras sopas de pasta, en el arroz y hasta en algunos moles- y protagonista en un sinnúmero de platillos de cocinas de otras latitudes. Sin duda, este maravilloso caldo es una fuente de sabor y nutrientes que debes tener en tu refrigerador constantemente para que dispongas de él cuando quieras.
Vegetales rostizados
Todo el mundo, incluso aquellos que no cocinan a menudo, necesitan dominar los vegetales tostados. Incluso no hay que dominar:basta con cortar, sazonar y agregar un poco de grasa. Para verduras firmes pero tiernas con un exterior agradablemente caramelizado, el truco es simplemente obtener la cantidad, el tiempo y la temperatura correctos.
Una vez que tengas las verduras listas, puedes reservarlas en un refractario y posteriormente agregarlas en donde gustes.
Cereales
Los cereales y leguminosas como el arroz, las lentejas, el cuscús, la quinoa o el que sea de tu elección son excelente opción para ser la base de cualquier platillo; basta con sazonarlos con sal y pimienta o agregr otras hierbas y se convierten en lienzo en blanco para cualquier cosa que prepares, como carnes asadas, pescados y verduras.
Frijoles
En los hogares mexicanos nunca falta una olla hirviente de frijoles y unas buenas tortillas para acompañar.
Esta maravilla originaria de Mesoamérica -unos dicen que en México, otros que en Perú- se hace en sopas, cremas, caldillos, fritos y refritos, chinos, guisados, colados, borrachos, con puerco y chipilín, charros y maneados. Además interviene en muchos antojitos tales como los sopes, tlacoyos, enfrijoladas, tostadas, tortas y tamales. También se elabora en dulce y existen muchos platillos regionales donde intervienen.
Condimentos y aderezos
Una vez que hagas tus propios aderezos y condimentos te preguntarás en qué momento pudiste gastar tanto dinero en el supermercado. En realidad cualquier condimento que te venga a la mente, incluso el más gourmet, puedes realizarlo en casa y agregar una bomba de sabor a tus platillos.
Botanas
Compra un montón de nueces, frutos secos y semillas para tu propia mezcla casera que puedes llevar a cualquier parte. También puedes guardar un tiempo para picar tus frutas favoritas y guardarlas en refractarios, es una manera fácil de tener a la mano refrigerios saludables y económicos. Te olvidarás de las tienditas de a lado de tu oficina.
