El croque madame es un platillo imperdible de la cocina francesa, consiste en un sándwich de jamón ahumado bañado en una bechamel enriquecida con queso Gruyère y que para rematar, va coronado con un huevo estrellado.

Esta salsa madre es una de las más conocidas y queridas de la cocina francesa y aunque solo lleva tres ingredientes, hace la diferencia en platillos como la lasaña o las croquetas españolas.

Un poco de historia del Croque Madame

El origen del nombre es incierto; sin embargo, la primera aparición de este platillo icónico francés fue en el año de 1910 en un café del Boulevard des Capucines en París.

El Croque Madame es un platillo que tiene muchas variantes; hay chefs que lo preparan con carne ahumada, con pollo o carnes rojas, incluso hay preparaciones que incluyen plátano macho en lugar de huevo frito.

Su pareja perfecta se llama Croque Monsieur que es exactamente lo mismo pero sin huevo. A la receta se le puede agregar más queso y va perfecto con una buena ensaladita de arúgula, jitomate cherry y aceite de oliva.

Un tip para hacerlos perfectos es encontrar el punto de la salsa bechamel. Te recomendamos prepararla a fuego bajito y dejarla un tanto líquida, de esta forma cuando la sirvas no se habrá cuajado.

Prepárala en casa

Ingredientes (2 porciones)

5 Cucharadas de mantequilla
3 Cucharadas de harina
2 tazas de leche entera
Sal
Pimienta negra
1 ⅓ tazas de queso Gruyère rallado
6 rebanadas de pan de caja
4 cucharaditas de mostaza
6 rebanadas de jamón
1 huevo
Nuez moscada

Procedimiento

Para la salsa

Derretir 3 cucharadas de mantequilla en una olla a fuego medio. Agregar la harina y mezclar durante tres minutos.
Incorporar a la preparación la leche a temperatura ambiente y volver a mezclar hasta que hierva.
Reducir el fuego y mover hasta que espese; agregar la sal, la pimienta, la nuez y el queso Gruyère.

Para el sándwich

Untar la mantequilla sobrante en uno de los lados de las rebanadas de pan. En la otra rebanada, poner un poco de mostaza.
Colocar un pan, una capa de jamón y otra rebanada de pan. Encima, poner más jamón y terminar con el último trozo de pan.
Tostar en un sartén caliente por los dos lados.
En otro sartén, freír un huevo y cuidar que la yema no se rompa.
Bañar el sándwich con la salsa, coronar con el huevo y agregar un poco de pimienta.