La vida es más feliz cuando comemos lo que más nos gusta y este pastel es una maravilla porque pasi no contiene azúcar, lo que significa que podemos sentirnos libres de culpa al comer una rebanada. Esta receta forma parte del libro Postres casi sin azúcar escrito por el chef Iván Millán y que Editorial Larousse nos comparte.

Prepararlo te tomará cerca de una hora y media y necesitarás 6 moldes circulares de 10 centímetros y una brocha. ¡Manos a la obra!

Ingredientes

Bizcocho

100 mililitros de aceite
100 mililitros de agua
10 mililitros de extracto de vainilla
140 gramos de yemas
20 gramos de sucralosa granulada
120 gramos de harina de trigo cernida
10 gramos de polvo para hornear
210 gramos de claras
c/s de colorante vegetal color rosa

Jarabe de rosas

300 mililitros de agua
100 gramos de jarabe de agave
20 pétalos de rosa

Crema de rosas

250 mililitros de crema para batir
8 gramos de sucralosa granulada
5 mililitros de esencia de rosas

Cobertura

300 gramos de almendra en polvo
160 gramos de miel de abeja
c/s de colorante vegetal color rosa

Montaje

Flores comestibles, al gusto

Procedimiento

Bizcocho

Precalentar el horno a 180 grados C. Engrasar y enharinar los moldes. Mezclar en un tazón el aceite con el agua y el extracto de vainilla. Batir con una batidora eléctrica las yemas con la sucralosa hasta que se blanqueen y esponjen. Vertir la mezcla de aceite, sin dejar de batir.

Combinar en otro recipiente la harina de trigo con el polvo para hornear e incorporar con movimientos envolventes a la mezcla de yemas y aceite. Batir las claras a punto de nieve e incorporar con movimientos envolventes a la mezcla de yemas y aceite.

Distribir en 6 tazones la mezcla de masa de bizcocho. Reservar una de las mezclas y al resto agregarles colorante vegetal rosa, aumentando gradualmente la intensidad de color para obtener 5 tonalidades distintas de rosa.

Vertir cada una de las mezclas en los moldes y hornear durante 20 minutos. Sacar los bizcochos del horno, dejarlos enfriar y desmoldar. Reservar.

Jarabe de rosas

Colocar todos los ingredientes en una olla pequeña y ponerla sobre el fuego. Dejar que hierva hasta obtener un jarabe. Retirar del fuego, dejar enfriar y colar.

Crema de rosas

Batir la crema para batir con la sucralosa hasta obtener picos firmes. Incorporar en movimientos envolventes la esencia de rosas. Reservar la crema de rosas en refrigeración.

Cobertura

Mezclar con las manos en un tazón amplio la almendra en polvo con la miel de abeja hasta obtener una pasta.

Agregar a la pasta de almendra algunas gotas de colorante vegetal rosa y amasar hasta obtener un color homogéneo. Si se desea un color más intenso, agregar un poco más de colorante y amasar nuevamente; repetir esto hasta obtener el tono deseado.

Dividir la pasta de almendra en 3 porciones. Espolvorear una mesa de trabajo con un poco de fécula de maíz, colocr encima una de las porciones de pasta de almendra y estirarla con un rodillo hasta que obtenga un grosor de 3 milímetros. Repetir este paso con las 2 porciones de pasta restantes. Reservar.

Montaje

Cortar los 6 bizcochos de manera horizontal en 3 porciones. Acomodar sobre una mesa de trabajo los 3 discos de color amarillo (sin colorante), barnizarlos con un poco de jarabe de rosas y untarlos con un poco de la crema de rosas; cubrir con los 3 bizcochos con la tonalidad rosa más clara, repetir el procedimiento. Apilar y rellenar los discos de bizcocho, colocar los discos en un color ascendente.

Untar toda la superficie de los 3 pasteles con un poco de crema de rosa y cubrir cada uno con una placa de cobertura.

Decorar los pastelillos con flores comestibles al gusto.