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#SabuesoGourmet: ¡No! ¡El pollo crudo y el huevo no se deben lavar!

Por Azucena Pacheco

¿Tus abuelas y tías solían enjuagar los huevos antes de refrigerar y lavar el pollo previo a echarlo a la parrilla? Déjanos decirte que han surgido muchas discusiones sobre qué tan dañino puede ser hacerlo y la respuesta es:

Verdadero

“No laven el pollo crudo”.

Esa fue la alerta que fue publicada en 2019 en la cuenta de Twitter los Centros para el Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés).

Según la agencia gubernamental, lavar el ave puede propagar microbios a otros alimentos y utensilios de cocina. Y aunque el argumento tiene sentido, la recomendación encendió el debate en las redes sociales.

Algunos reaccionaron con asco, señalando los días que pueden pasar las piezas de pollo en sus empaques flotando en porquería e insistiendo en que continuarían lavándolo.

Otros optaron por burlarse de la propuesta y unos más simplemente comentaron que lo que se podía hacer después de lavar el pollo era lavar el lavabo.

Si bien los CDC reconocieron que no querían alarmar, fueron enfáticos en su postura, asegurando que la mejor manera de matar las posibles bacterias del pollo es cocinándolo bien.

“No se deben lavar ni el pollo, ni otras carnes ni huevos antes de cocinar. Puede propagar microbios por toda la cocina”.

Pero ¿cuál es el peligro real de lavar el pollo y los huevos?

Es peligroso lavar el pollo y los huevos

La nutrióloga Nayeli Villanueva Cárdenas, en servicio de alimentación del Hospital de Ortopedia Victorio de la Fuente Narváez del IMSS, apoya que no se deben lavar el pollo ni los huevos pues podría generar:

Peligro de intoxicación

“Lavar el pollo antes de cocinarlo aumenta el riesgo de propagación de la bacteria campylobacter en las manos, las superficies de trabajo, la ropa y utensilios de cocina a través de la salpicadura de agua”.

Las salpicaduras con esa bacteria podrían ocasionar enteritis por campylobacter, una de las causas más comunes de intoxicación alimentaria.

Esto también puede suceder si el pollo no está bien cocido, como el que encontramos numerosas ocasiones en las cadenas de comida rápida que venden pollo frito.

“Los síntomas de la enteritis por campylobacter pueden ser diarrea, dolor abdominal, fiebre, náuseas y vómito”.

Pero las consecuencias de lavar el pollo pueden ir más allá de una enfermedad que se quita por completo y pueden ser permanentes y hasta mortales.

Comer pollo y huevos lavados y sus secuelas

Es peligroso lavar el pollo y los huevos

Aunque para la mayoría de las personas víctimas de esta clase de intoxicación sólo estarán enfermas por unos días, el campylobacter también puede ocasionar problemas de salud a largo plazo.

El más frecuente es el síndrome de intestino irritable, comúnmente conocido como colitis, que genera inflamación abdominal y problemas para evacuar, ocasionando estreñimiento o diarreas.

Pero el más peligroso es el síndrome de Guillain-Barré, una rara enfermedad en la que tu sistema inmunológico ataca tu sistema nervioso periférico.

En casos menos frecuentes, esta bacteria también puede ocasionar la muerte, sobre todo en niños y personas de edad avanzada.

“Normalmente el tratamiento para una infección con esta bacteria consiste en tomar abundante agua, comer pequeñas porciones de alimentos blandos durante el día, en vez de grandes cantidades tres veces al día, llevar una dieta alta en potasio, e ingerir comidas saladas.

Así que ya sabes, no laves el pollo ni los huevos. Podría ocasionarte más problemas que beneficios.

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