La economía azul es de suma importancia para el desarrollo sostenible a nivel mundial ya que contribuye a la seguridad alimentaria, a los ecosistemas marinos además de generar beneficios económicos.
El término se utiliza para referirse a todos los sectores económicos y las políticas que en conjunto determinan si el uso de los recursos oceánicos es sostenible, según el Banco Mundial.
Qué es la economía azul/ Foto: Shutterstock
Además, la economía azul busca promover el crecimiento económico, la inclusión social y la preservación de los medios de subsistencia y, al mismo tiempo, garantizar la sostenibilidad de los océanos y las zonas costeras.
Es importante crear conciencia sobre la importancia de los recursos de los océanos y costas más allá de la pesca y el turismo. Los océanos desempeñan un papel crucial en la regulación del clima y la absorción de dióxido de carbono.
“La vida en los océanos ha ido disminuyendo en todo el mundo debido a la sobrepesca, la destrucción del hábitat y el cambio climático. Sin embargo, solo el 7 por ciento del océano está actualmente bajo algún tipo de protección”, señaló el Explorador Residente de National Geographic Enric Sala en una entrevista a National Geographic.
¿Qué es la economía azul y cómo ayuda al planeta?/Foto: Shutterstock
Se busca que la sociedad consuma dependiendo de los recursos naturales que tiene más cerca a su disposición, sin depender de métodos de producción intensiva de alimentos en otras zonas que requieren grandes cadenas logísticas o medios de transporte que emiten gases de efecto invernadero al medioambiente.
Para la economía azul los residuos son considerados una fuente de riqueza, por lo que los materiales que resultan de un proceso productivo se pueden utilizar en otro ciclo como materia prima. El objetivo es que no existan desperdicios ni basura. Generar biocombustibles o materiales como los bioplásticos a partir de desechos vegetales son algunas alternativas.
La economía azul busca conciliar el crecimiento económico con la protección del medio ambiente/Foto: Shutterstock
La economía azul pretende fomentar un nuevo sistema económico alejado del concepto de usar y tirar continuamente los recursos que nos ofrece la naturaleza.
Que exista una mayor conciencia que puede significar un menor uso de los recursos naturales y, en consecuencia, también una menor cantidad de residuos. Es importante preguntarse ¿es indispensable? ¿es necesario? ¿se puede reemplazar por otro producto o materia prima?
Más de 260 millones de personas trabajan directamente en la pesca y la acuicultura y la ONU estima que las actividades económicas ligadas a los océanos generan entre tres y seis billones de dólares al año.
Es importante garantizar la sostenibilidad de las actividades que se desarrollan alrededor de los océanos para asegurar la sostenibilidad de un futuro para todos los habitantes del planeta.