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Foto: Paloma García Castillejos

Si son galletas de maíz, están ricas y son norteñas, ¡seguro son coricos!

Por Paloma García Castillejos

Coricos, tacuarines, galletas de maíz, pemoles, ensecos… llámales como quieras. Este antojo de media tarde se deshace en la boca y tiene unos aromas deliciosos que se antojan para acompañar un chocolatito o un café de olla.

Para nadie es una sorpresa que los sabores del maíz componen gran parte del imaginario gastronómico de México. La mitología dice que el hombre salió de él y con él también se ha alimentado durante su existencia. Por este motivo, tampoco sorprende que además de ser la columna vertebral de la comida salada, también sea un maravilloso ingrediente para preparar postres y confitería.

Las galletas que endulzan la vida en el norte

En la Huasteca potosina hay una receta que aprovecha los aromas de la canela para dar vida a estas rosquillas cuya base es la harina de maíz.

También existe algo similar en Nuevo León, pero para Sinaloa, Baja California y Sonora se llaman tacuarines o coricos a este postre maravilloso con notas a naranja y vainilla.

Sea cual sea el nombre y la denominación geográfica, hay algo en común entre todas las galletas de maíz: su consistencia -similar a un polvorón- que guarda lo mejor de la milpa y que además, son tan cálidas y sabrosas que dan ganas de tenerlas siempre cerca, como un amor o una necesidad.

La receta original de los coricos utiliza manteca en lugar de mantequilla y en algunos casos es vegetal. Esto es para hacer galletas más firmes, sacrificando un poco el sabor lácteo que aporta la grasa animal.

Una receta para preparar en casa

Ingredientes

  • 1 barra de mantequilla de 90 gramos o manteca
  • ⅓ taza de azúcar
  • ¾ taza de harina de maíz (sí, la misma que se utiliza para hacer tortillas)
  • 1 huevo
  • ¼ cucharadita de polvo para hornear
  • ½ cucharadita de esencia de vainilla
  • Ralladura de naranja
  • Azúcar glass y canela en polvo para decorar

Procedimiento

  1. Precalentar el horno a 200°C.
  2. Con una batidora o globo, acremar la mantequilla y agregar el azúcar hasta que se integre y sea una mezcla esponjosa.
  3. Incorporar el huevo y la esencia de vainilla; seguir mezclando.
  4. En un recipiente aparte, mezclar la harina de maíz con el polvo para hornear y la ralladura de naranja.
  5. Integrar ambas mezclas y trabajar hasta que la masa se despegue del recipiente.
  6. Enharinarse las manos y una superficie plana, tomar un poco de la mezcla y hacer una especie de rollo. Unir los dos extremos para cerrar el círculo.
  7. Colocar sobre una charola con papel encerado o silicón.
  8. Hornear por 10 minutos a 200°C.
  9. Cuando estén doradas de los bordes, apagar el horno y sacarlas. Dejar enfriar.
  10. Mezclar el azúcar glass con la canela y espolvorear sobre las galletas.