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La mistela: una tradición que se toma

Por Mariana García

La mistela es una bebida alcohólica elaborada a partir del jugo de uva; en México se prepara con otras frutas como el durazno, nanche, limón, mango o piña o de frutos secos como la nuez y la almendra. 

Una tradición del sur de México 

Es un licor típico de Chiapas aunque también se consume y elabora en Tabasco, Oaxaca, Campeche y Yucatán. 

Para su elaboración se maceran las frutas en alcohol de caña y se deja reposar durante un periodo largo, -pueden ser semanas o meses- y posterior a eso se retira la carne de la fruta para dejar únicamente el jugo.

En el Istmo de Tehuantepec, en Oaxaca se considera una bebida tradicional; aquí se prepara con 96º de alcohol, agua y frutas. La pulpa sobrante del proceso de elaboración se transforma y vende como golosinas.

Sinónimo de costumbres y tradiciones

En Oaxaca se toma como digestivo o aperitivo. Anteriormente la mistela formaba parte del menú en las celebraciones y eran muy comunes los sabores como anís, rosas y cerezas.

En Yucatán se elabora con naranja y anís, también lo preparan con hierbabuena y a esta mezcla se le conoce como verdín.  

Actualmente es muy común tomarla acompañada de algún postre o pastelillo. 

La mistela también se toma en España

Esta bebida también es típica de la Península Ibérica, sobre todo en las provincias de Turis, Marina Alta, Utiel y Requena en la Comunidad Valenciana; aquí también se le conoce como “Tierno”.

A diferencia de la mistela elaborada en México, la de España se prepara en su mayoría con uvas blancas como la Moscatel o Malvasía y tintas como Garnacha y Tempranillo. 

Después de que estas son retiradas del racimo, son prensadas para colocar el alcohol de 96°, con la intención de evitar que el vino se fermente. La mayoría de las mistelas son colocadas en barricas para potenciar sus aromas y sabores.