[contextly_sidebar id=”236060a898bc54155f68d0d91dc46cb8″]La comida no sólo es sabores y aromas, también colores. Alterar los colores de los alimentos los saca de su contexto y les puede dar un carácter e interpretación distinta a la que tienen.
Incluso, un nuevo color en un alimento ya reconocido puede alterar la preconcepción de su sabor. Por ejemplo, un plátano rosa pensaríamos que sabe a plastilina.
Así, el fotógrafo californiano Lawrie Brown juega con nuestras ideas previamente construidas sobre los alimentos y los sabores, para mostrar que quizá ningún alimento sea completamente sano por la intervención del humano en su cultivo y/o producción.
Te invitamos a ver ‘Colored Food’ de Lawrie Brown. Si te gusta su trabajo y deseas conocer más, visita su sitio en internet: www.lawriebrown.com