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Miraval, el hijo vinícola de Brad Pitt y Angelina Jolie

Por Animal Gourmet

Brad Pitt y Angelina Jolie son una pareja muy famosa y multifacética. Ahora además de estar en el mundo del cine han decidido incursionar en la enología por lo que hoy llega a tierras mexicanas con el nombre de Miraval, un vino rosado, fresco y perfecto para el verano elaborado un pueblito de Correns, al norte de Brignoles en el corazón de Provence.

Miraval salió a la venta en Europa, Inglaterra y Francia, donde fue tanta la expectativa a su llegada que había una larga lista de espera para poder comprarlo. De hecho sus primeras botellas, con añada del 2013, se acabaron antes de salir al mercado. La realidad de este vino es que ha llegado al numero 84 de “Wine Spectator’s list of the top 100 wines of 2013” y fue el único rosado que logro entrar en la afamada lista.

Las uvas con las cuales se hace este vino son Cinsault, Grenache, Syrah y Rolle, que resultan en un vino color rosa pálido con aromas a flores y frutos del bosque. Tiene un toque salado proveniente del terruño, y en boca recuerda a los sabores de las fresas y ciruelas.

El viñedo del cual se produce el Miraval, es cultivado de manera orgánica; no se usan ningún tipo de herbicidas ni insecticidas, que ademas de poder afectar la evolución de la fruta sus residuos pueden terminar en el vino que bebemos.

Cuando las uvas están perfectas se seleccionan a mano para empezar su proceso de vinificación, el cual se hace en alianza con la Famille Perrin, reconocidos líderes en producción de vino en tierras francesas.

Este lugar ademas de tener las vides perfectas es el chalet de verano de la famosa pareja, pero su historia es mucho más antigua y llena de glamour. La casa fue ocupada por la nobleza del siglo XVI. En 1970 la compró el famoso pianista y compositor de jazz Jacques Loussier, el cual la convirtió en un estudio de grabación donde estuvieron estrellas de la categoría de Pink Floyd y Sting.

Si quieres probar este vino, lo puedes comprar por 380 pesos en la Europea Cabos y Cancún, y en algunos suertudos restaurantes del Distrito Federal que aún son sorpresa.