En la cuarta edición del Festival de la paella en Hacienda Sepúlveda, que se llevó a cabo el 9 y 10 de octubre de 2021, pudimos disfrutar de dos delicias gastronómicas: auténtica paella valenciana y la llamada paella prehispánica.
Este evento busca honrar las tres etapas del mestizaje mexicano con buena comida, música, danza y vinos.
La fusión gastronómica del Festival de la paella
Una de las protagonistas fue la interpretación de la paella original valenciana, la cual se preparó con arroz amarillo perfumado con azafrán y como guarnición traía carnes frías, pollo, carne de cerdo y mariscos.
La paella prehispánica la cocinaron con tinta y aros de calamar, almejas, elote, huitlacoche y camarón; de esta forma, Hacienda Sepúlveda consiguió una propuesta gastronómica única en interesante para reinterpretar este clásico español.
La fusión cultural y musical
Para representar lo más relevante de nuestras dos culturas madre, el festival comenzó con un ritual prehispánico; este consistió en mostrar danza, poesía y acrobacias por artistas ataviados con penachos y taparrabos.
Más tarde, el escenario se convirtió en un tablao; guitarras y bailarines flamencos, típicos de la región sureña de Andalucía, en España.
El tercer acto de esta demostración fueron las danzas folclóricas mexicanas, en las que se observó ya la plena fusión de ambas culturas y tradiciones.
Los vinos del Viejo y el Nuevo Mundo
Dentro de este evento, también hubieron degustaciones de tres etiquetas, una mexicana y dos españolas: Puerto Nuevo, del Valle de Guadalupe en Baja California; Guelvenzu, de Ribera de Queiles, y Reinares, un tempranillo catalán.
A las deliciosas paellas que sólo se pueden probar durante este festival, se sumaron los platillos emblemáticos de la carta habitual de Hacienda Sepúlveda, como la sopa prehispánica, a base de pepita de calabaza con caldillo de chile pasilla, tomatillo y pan sobre cama de nopales y crujiente de pepita de calabaza.
También es una delicia el caldo de piedra: de mariscos y verduras con caldillo de jitomate, a la que se le introduce una piedra volcánica para darle temperatura y cierto gusto mineral característico.
Los festivales de Hacienda Sepúlveda
Durante todo el año, Hacienda Sepúlveda ofrece a sus comensales una serie de festivales para honrar nuestra herencia y tradiciones gastronómicas; en febrero cuentan con el Festival del tamal, donde año con año ofrecen diferentes tamales y atoles de distintas regiones del país.
El Festival del taco, en julio, en el que podrás probar catorce variedades como magret de pato, cochinita, pacholas, vegetarianos con tortilla de arroz, entre muchos otros.
En septiembre, el Festival del Nopal, tuna y xoconostle, donde preparan recetas fusión como chamorro al pulque, biscocho de nopal o helado de tuna.
En noviembre, El Festival de Día de Muertos. Lo celebran con una sopa de cuatro quesos regionales de Lagos de Moreno; crema de calabaza de castilla, pollo bañado con mole rústico negro, chilpachole y pan de muerto con rellenos como crema catalana, frutos rojos o mermelada de chiles.
Para enterarte de todos estos eventos sigue a Hacienda Sepúlveda en su página web, Facebook e Instagram. Si quieres conocer más acerca de nuestra gastronomía prehispánica, pasa por aquí.
