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¡Ricos tamales oaxaqueños! Receta para prepararlos en casa

Por Paloma García Castillejos

¿Ya pasó la bici por tu colonia y te quedaste con el antojo? Aunque no lo creas, los tamales oaxaqueños son mucho más que solo masa, salsa y carnita: de hecho, hay tantas recetas como cocineras del estado y queremos que tengas un pedacito de toda esta riqueza cultural en tu mesa.

De acuerdo con la región son las preparaciones; en la Ciudad de México, aquella bicicleta que pasa también con atole ofrece una versión de tamales oaxaqueños envuelta en hoja de plátano y rellena de diferentes salsas.

Sin embargo, el asunto es variadito: igual hay con totomoxtle -las hojas secas del maíz- en los Valles Centrales y el Papaloapan, zona platanera por excelencia, aprovecha sus hojas y fruto.

Hay cosas que permanecen constantes: una sazón excepcional, poca manteca y casi nada de polvo para hornear. El resultado, en contraste con el clásico tamal chilango es que la masa esponja poco y más bien es el relleno lo que luce.

Para no seguir antojándote, acá te va una receta muy facilita y cumplidora. Para evocar a todos los sabores de Oaxaca utilizaremos mole y, si quieres hacerlo desde cero en casa checa esta receta de la cocinera zapoteca Abigail Mendoza.

Ingredientes (20 tamales oaxaqueños)

  • 1 kilo de masa para tortillas (se consigue en las tortillerías o bien mezclando a un tanto de harina de maíz con medio de agua tibia y sal)
  • 10 hojas santas
  • 1/2 kilo de lomo de cerdo o pechuga de pollo (al gusto)
  • 1/2 cebolla
  • 2 dientes de ajo
  • Hojas de laurel al gusto
  • 2 tazas de mole negro (o el que tengas en casa)
  • 4 Cucharadas de manteca de cerdo o aceite vegetal
  • Suficiente sal
  • Hojas de plátano suficientes

Procedimiento

  1. Cocer la pechuga de pollo o lomo de cerdo en agua con sal, cebolla y ajo al gusto. Dejar enfriar y deshebrar. Reservar.
  2. En una cacerola, calentar el mole e incorporar la carne deshebrada. Sazonar y reservar.
  3. Batir la masa de maíz con la manteca hasta que se esponje. Ajustar de sal.
  4. Al fuego vivo, tostar un poco las hojas de maíz para volverlas flexibles.
  5. Cortar las hojas de maíz en cuadros de 30 centímetros por lado aproximadamente.
  6. En el centro, colocar la mitad de una hoja santa y encima, suficiente masa de maíz.
  7. Encima, servir algo del pollo con mole y cubrir con un poco más de masa.
  8. Doblar la hoja de modo que se cubra completamente la masa y no se salga nada.
  9. Cocer al vapor durante 1 hora.

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