

Nada más molesto que un tamal congelado, el antojo no se puede contener. Pero todavía más molesto, no saber recalentarlo y que se rompa o ponga duro en el proceso. Pero no te preocupes, porque en Animal Gourmet hemos diseñado la guía perfecta para recalentar un tamal y dejarlo como nuevo.

Iniciemos con lo más difícil, congelar es parte natural del proceso de cocina. Más si tu tía Lupe te dio un itacate de 10 tamales después de la noche mexicana el 15 de septiembre.
Así que congelar es la opción más viable, pero también la más molesta. Pero no te preocupes, lo primero que debes hacer por obvio que parezca es descongelarlo.
Así que deja toda la noche en el refrigerador o bien, un par de horas a temperatura ambiente. Aunque hay muchas otras alternativas más rápidas, esta es la que menos dañará el producto.

Otro método efectivo para descongelar, es curiosamente el más efectivo para recalentar. Así que si tienes prisa, igual y podrías saltarte el primer paso para tener un tamalito esponjoso y bien calientito en tu mesa.
La mejor forma de recalentar un tamal es en una vaporera. La hidratación lenta y constante, así como el incremento paulatino de la temperatura, cuida el producto al máximo.
El lugar que los vio nacer, será siempre el que mejor los trate:
Yo sé, yo sé. La vaporera es el método más engorroso y tardado de todos. Además no vale la pena si solo quieres calentar un tamalito, pero eso no le quita que sea el mejor.
Ahora bien, si te ganó la desesperación y quieres una forma más rápida de recalentar tus tamales o no tienes vaporera, aquí te van algunas alternativas.

Es sencillo, pero tal vez igual de lento que en la vaporera. Aquí la clave está en controlar la temperatura que entra en el tamal. Debe ser constante, pero no abrasadora.
Por ello se recomienda lo siguiente:
Este método es el ideal para todos aquellos que desean mantener la calidad del producto al máximo, pero igual no tienen vaporera.

La más rápida de todas las opciones, sin embargo, es fácil cometer errores y terminar comiendo tamales que parecen suelas de zapatos.
La desventaja es que todos los microondas poseen diferentes potencias, por lo que pueden llegar a secarse o “sudar” de más. La sugerencia para hacerlo bien es:
Recalentar tamales en el microondas es muy efectivo, siempre y cuando sigas los pasos al pie de la letra.

Otra forma efectiva de recalentar tus tamalitos, es con una airfryer. Al igual que el microondas, sirve para calentar de forma rápida, pero más propensa a errores.
Algunas tienen la función de reheat lo que hace el trabajo mucho más sencillo. Pero no te preocupes, si tu freidora de aire no tiene esta función, lo que debes hacer es:
Esta forma resulta muy efectiva para cumplir con el propósito, sin embargo, es posible que la falta de humedad pueda hacer que queden resecos.

El método menos efectivo de todos, hacerlo en la estufa requiere de mucha precisión y atención. Por lo que no se recomienda recalentar si la cocina no es lo tuyo.
La forma ideal para lograrlo es la siguiente:
Ahora sí, a disfrutar del tamal o guajolota que más se te antoje. Con esta guía completa de cómo recalentar un tamal, tienes las herramientas necesarias para evitar dañarlo en el proceso.
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