“Comer de manera balanceada”. Ésta suele ser la premisa desde la que parten innumerables dietas y programas alimenticios que prometen, en caso de seguir las instrucciones que ahí plantean de manera detallada, bajar de peso, estar más sano y tener una mejor apariencia. Pero hay una manera más sencilla para encontrar una dieta balanceada. Y de hecho, se encuentra en el cuerpo humano. En las manos, para ser exactos.
Guard your Health, una instancia del gobierno de Estados Unidos dedicada a proveer con información de salud a soldados de la Armada Nacional y su familia, publicó una guía en la que sitúa a partes de la mano -las puntas de los dedos, el pulgar, el puño y la palma– como indicadores de la ración de alimentos que una persona debe de ingerir al día para tener una dieta balanceada.
Así, por ejemplo, para tener una ración adecuada de azúcar por día, una cucharada de ésta no debe de superar el tamaño de la punta del dedo; para una de carne, ésta no debe superar el tamaño de la palma. Con el pulgar se mide la ración adecuada de mantequilla: el tamaño del pulgar es proporcional a la cantidad de mantequilla que una cuchara de mesa puede albergar.
La ración es proporcional: depende del tamaño y la complexión de la persona.
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