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Alimentar al mundo con insectos

Por Mariana Toledano

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Cerca de 795 millones de personas en el mundo no tienen suficientes alimentos para llevar una vida saludable. En los países en vías de desarrollo, el 13.5% de la población presenta desnutrición y ésta es la culpable del 45% de las muertes de niños menores de cinco años, 3,1 millones anuales. Uno de cada cuatro de los niños del mundo padecen un retraso en el crecimiento, motivado muchas veces por la falta de proteínas en su dieta, que lleva además a una reducción de la esperanza de vida. Unos problemas que lo más probable es que se agraven para 2050, cuando se estima que el planeta Tierra albergue a 9.000 millones de personas.

Esto preocupaba, y mucho, al emprendedor israelí Dror Tamir y a sus compañeros Chanan Aviv y Ben Friedman, así que decidieron hacer algo al respecto y fundar la empresa Steak Tzartzar para tratar de suplir de proteínas los países cuya población tienen un déficit de las mismas. ¿Su truco para triunfar donde otros fracasaron? Tzartzar significa en hebreo saltamontes. En su caso, insectos cultivados industrialmente.

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Aunque pueda sonar desagradable desde el burgués y sobrealimentado paladar occidental, ya hay 2.500 millones de personas en el mundo para los que los insectos son una fuente habitual de proteínas. Entre los bichos, los saltamontes resultan más comestibles que el resto, además de ser una buena fuente de proteínas y barata de producir y cultivar.

De momento, la empresa tiene un conjunto de instalaciones de pruebas al norte de Israel. Allí ensayan cultivando ocho especies diferentes de saltamontes y sus planes son tener su primera planta comercial a finales de 2016. Para cuando llegue este momento, ya están en negociaciones con varios países, aunque son conscientes de que la estrategia de venta de un producto como este es complicada.

Para ello hay ideado un par de formas de solventar las dificultades. Según cuenta la web Libremercado, en Oriente venderán el bicho entero y en Occidente solamente machacado. Mientras que en el primer mercado se centrarán en el público en general, en el segundo su primer objetivo serán los atletas, siempre dispuestos a comer cualquier cosa que mejore el rendimiento.

Un estrategia interesante, que puede ser que funcione o quede en la estacada. La cuestión es intentarlo.