En estos días de lluvia y frío se antoja una crema de calabacita para apapacharnos -y si no lleva leche, mejor-.
La receta que te compartimos a continuación forma parte del libro Larousse Escuela de Cocina, editado por Larousse, y la podrás cocinar en menos de media hora. ¡No hay pretextos para dejar pasar algo tan rico y nutritivo!
Corte las papas y las calabacitas en cubos.
Hierva los cubos de papa y de calabacitas junto con la cebolla en el agua con un poco de sal, hasta que las verduras estén suaves.
Licúe las verduras con un procesador de alimentos manual y, sin dejar de batir, añada aceite de oliva al gusto. Sirva la crema con crutones de pan rustico tostado y un poco de aceite de oliva extra virgen encima.