drag_handle

¡Sí se puede! Maridaje perfecto entre chocolate y vino

Por Animal Gourmet

¿Chocolate? ¿Vino? ¿Los dos juntos? ¡Sí! Es posible crear un maridaje perfecto con estos dos elementos que nos encantan por separado.

La palabra maridaje puede dar hasta miedo. ¿Por qué? Quizá suponemos que es muy difícil crear el matrimonio perfecto entre quesos, carnes frías, chocolate, pan y vino.

No creas que hacer esto es solamente para expertos, puede llegar a ser muy sencillo si dejas que los aromas y sabores creen una experiencia nueva y agradable a la hora de combinarlos.

Te puede interesar: 

Las más raras y deliciosas combinaciones con chocolate

Vino caliente: Una receta reconfortante y especiada para tus posadas 

¿De verdad combinan el chocolate y vino?

Una de las cosas que debemos tomar en cuenta a la hora de maridar cualquier cosa es los sabores que se encuentran en lo que vayamos a combinar. Estamos hablando de dulce, salado, ácido, amargo y umami.

También hay que valorar la textura: si es demasiado cremoso deberá ir con algo ácido que lo equilibre; completamente distinto a un chocolate más granuloso o ácido al que le van muy bien opciones especiadas y más densas.

No es lo mismo comprar uno comercial que tiene modificaciones químicas durante su producción que uno artesanal en donde el 80% de este sea cacao.

¿Cómo combinarlos?

El maridaje se trata de que la combinación de dos alimentos donde se resalten mutuamente; es decir, hay que saber qué mezclar y qué no. Para tenerlo claro, primero que nada hay que probarlos por separado y nivelar el sabor de ambos.

¿Qué pasa, por ejemplo, si eliges un chocolate muy dulce y un vino más potente? Definitivamente, ninguno lucirá del todo.

Amargo o negro (70 a 100% cacao)

Entre más cacao tenga el chocolate más intenso debe ser el sabor del vino. A ambos los podemos reconocer por el color tan potente que tienen. 

Para los amargos se recomienda maridar con un Malbec o Shiraz por ser astringentes y nivelar la acidez que produce el cacao.

Atrévete a probar botellas que tengan paso por barrica. Las notas a madera y especias le van excelente a las características de este chocolate.

Chocolate blanco

Este chocolate está hecho a base de manteca de cacao, por lo que su textura suele ser más cremosa y su sabor dulce. Se debe acompañar con vinos más secos y frutales para que la acidez corte la grasa.

Lo mejor será que acudas a un blanco; la uva Chardonnay es perfecta para poner guapo al chocolate blanco.

chocolate y vino

Chocolate con leche  (25% y 40% cacao)

El chocolate con leche es un balance perfecto entre el blanco y el amargo que tiene entre un 25 y un 40 por ciento de cacao. Para esta variedad es recomendable tomar un vino tinto joven Moscato o Merlot ya que el nivel de dulzura equilibra a las notas lácteas.

Si eres más de blancos opta por las opciones dulces con notas frutales y a flores.

chocolate y vino

La magia del maridaje es que haya una sensación distinta al comer dos alimentos juntos que cuando sucede de formas separadas.