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La comida y el cáncer de mama, la prevención comienza en la cocina

Por Érika Choperena

El cáncer de mama es una enfermedad que -aunque no distingue género- afecta gravemente a las mujeres. El Instituto de Investigaciones Biomédicas de la UNAM (IIBm) asegura que este padecimiento es la primera causa de muerte por tumores para las mexicanas.

A pesar de que la incidencia entre nuestro país y Estados Unidos es similar, la tasa de mortalidad en México es el doble. ¿Por qué? Allá el 80% de las mujeres son diagnosticadas en las primeras fases de la enfermedad mientras que en México en las etapas 3 o 4.

Otra variante que el IIBm investiga es la relación que tiene con el sobrepeso y el sedentarismo. El 70% de quienes padecen cáncer de mama presentan cuadros de obesidad y llevan un estilo de vida poco activo.

“Pensamos que el sobrepeso produce alteraciones metabólicas y hormonales, y es en esa condición anormal en la que se desarrolla el tumor. Hemos propuesto que las células que crecen en ese ambiente serán distintas a las que se desarrollan en condiciones normales”

Alejandro Zentella Dehesa, investigador de IIBm.

A continuación te dejamos algunos de los alimentos que tienen nutrientes y elementos que pueden ayudar a la prevención de este padecimiento.

Si bien no se garantiza que un solo alimento pueda evitarlo en su totalidad, la alimentación e incluirlos en tu dieta pueden ser un gran aliado.

10 alimentos aliados contra el cáncer de mama

Champiñones

La ingesta de champiñones se ha asociado con un menor riesgo de cáncer de mama entre las mujeres premenopáusicas.

En un estudio publicado en el International Journal of Cancer descubrieron en China que quienes consumían al menos 10 gramos de hongos frescos tenían dos tercios menos de desarrollar cáncer de seno, al contrario de las que no.

Además, los champiñones le agregan vitamina D al organismo.

Frijoles

Según investigadores de la Universidad de Harvard, por cada 10 gramos de fibra consumida diariamente, el riesgo de padecer cáncer de mama se reduce un 7% en adultos jóvenes. 

¿La causa? Ellos especulan que la fibra ayuda a reducir los niveles de estrógeno en la sangre cuando son altos. Esta hormona está vinculada al desarrollo de esta enfermedad y por eso los frijoles son grandes aliados.

Cualquier tipo de legumbre contiene altos niveles de este nutriente, sin embargo, los frijoles blancos contienen al menos 9.6 gramos de fibra por media taza.

Nueces

La nueces juegan a nuestro favor de dos formas. En primer lugar, contienen tocoferol gamma, una vitamina que detiene la activación de Akt, esencial para el desarrollo de las células cancerosas. 

El segundo motivo es la presencia de fitoesteroles que ayudan a regular los niveles de estrógenos, ya sea en hombres o mujeres. Es un compuesto natural que existe en los productos de origen vegetal y también recomendado para mantener la salud cardiovascular.

Una investigación publicada en la revista especializada Nutrition and Cancer reveló que en un estudio con ratones que consumían el equivalente en humanos a 57 gramos de nueces diariamente durante un mes se retrasó el crecimiento de tumores. 

Jitomates

El licopeno fue particularmente efectivo para ayudar a la mujeres a tratar el cáncer de mama de acuerdo con una investigación; además de registrar que las mujeres con niveles altos tenían un riesgo 22% menor a padecer esta enfermedad.

¿Adivina qué? Este carotenoide -como se conoce en el argot científico- se encuentra en los jitomates. ¡Sí! Así que date vuelo con todos los platillos que tengan que ver con él, tu salud lo agradecerá.

Aunque en México tenemos un estilo de vida muy distinto al de Japón, un estudio descubrió que las mujeres que bebían al menos una taza de té verde diario tenían niveles de estrógenos más bajos en la orina.

El té preparado con camelia sinensis está repleto de polifenoles, una clase de antioxidantes con múltiples beneficios a la salud.

Brócoli

El brócoli no es del agrado de todas las personas por su fuerte aroma y sabor. Sin embargo, puedes cambiar de opinión pues contiene un activo antiinflamatorio llamado sulforafano.

Este compuesto del brócolí ayuda a inhibir el crecimiento de número de células cancerígenas. Para disfrutar mejor las propiedades de este vegetal te recomendamos sólo cocinarlo al vapor.

cáncer de mama

Huevo

La colina es un nutriente esencial difícil de obtener que podemos encontrar en el huevo. Según un estudio de biología experimental, las mujeres que consumieron en mayores cantidades este nutriente tuvieron un menor riesgo de padecer cáncer de mama en comparación con las que ingirieron menos.

Hay muchas formas de comer huevo y con estos tips parecerás experto.

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Zanahoria

Hay estudios pequeños y grandes, esta vez hablaremos de uno que incluye a 33 mil mujeres. De acuerdo con una investigación publicada en el American Journal of Clinical Nutrition aquellas que tenían mayor cantidad de carotenoides en la sangre tenían un riesgo entre 18 y 28% menor de cáncer de mama.

Ahora sí, a preparar todas esas zanahorias que por fortuna contienen este antioxidante.

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Fresa

¿A quién no le gustan las fresas? Estas pequeñas bayas además de contener muy pocos carbohidratos -por si andas preparando la dieta keto- pueden ser grandes aliadas para combatir el cáncer. 

De acuerdo con un estudio sus compuestos fenólicos pueden inhibir la proliferación de células de cáncer de mama en modelos in vitro. Además de todos lo nutrientes que proporcionan las fresas al organismo.

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Naranja

Consumir cítricos como las naranjas nos proporcionan vitamina C pero también tienen propiedades quimiopreventivas. 

Ve poniendo en tu lista de compras esta fruta y otros cítricos que de acuerdo con una investigación reducen el riesgo a padecer cáncer de mama.

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Tepoz Rosa y su lucha contra el cáncer de mama

Chefs e integrantes de la fundación Tepoz Rosa se aliaron para organizar una comida en beneficio de la prevención en el Hotel Boutique Casa Fernanda. Liz Galicia de El Mural de Los Poblanos, Diana Durán del Mesón de la Sacristía y el chef anfitrión Iván Quiroz Lara fueron los encargados de preparar el menú.

Entre los platillos destacó la ensalada de betabel, que tomó protagonismo en la comida gracias a la betanina que le da su color rojo intenso pero que también participa como flavonoide. Estos compuestos se pueden considerar aliados en contra del cáncer.

Por su parte, la chef Liz Galicia preparó un mole rosa de piñón, este mismo platillo está durante todo el mes de octubre en su restaurante y lo recaudado es donado a instituciones que apoyan la lucha contra el cáncer de mama.

Colaborar con fundaciones y programas que ayudan a combatir el cáncer de mama es una gran manera de ayudar. La fundación Tepoz Rosa busca disminuir la muerte de las mujeres con este padecimiento en Tepoztlán, Morelos.