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El Páramo de los Duendes en Huaquechula / Foto: Azucena Pacheco

El Páramo de los Duendes en Huaquechula y sus ofrendas monumentales

Por Azucena Pacheco

El Páramo de los Duendes está en Huaquechula, un pueblo muy interesante a una hora de la ciudad de Puebla.

Este es un lugar pintoresco y místico, pero lo que en verdad te va a encantar es el trabajo de los artesanos que dan vida a esta pequeña villa de duendes en medio de un bosque.

La idea para llevar a la vida este lugar surge en 2019, y aunque la mayoría de nosotros está familiarizado con la representación del duende irlandés o ayudante de Santa Claus, en Huaquechula son seres que tienen características específicas y se les conoce como ateteos, tlaloques, aluxes o chaneques.

Al llegar al Páramo de los Duendes en Huaquechula

Páramo de los Duendes Huaquechula

Páramo de los Duendes en Huaquechula / Foto: Azucena Pacheco

Lo primero que tienes que hacer es tocar la campana de la entrada para avisarle a los duendes que los quieres conocer.

Creas o no en estos seres míticos, recorrer este lugar es toda una experiencia. Admirar el arduo trabajo en madera de los artesanos es una experiencia inolvidable.

Si tú sí crees en los duendes y quieres que te cumplan un deseo (o al menos que no te hagan travesuras) les puedes dejar juguetes, dulces o monedas.

Durante el recorrido, los encargados del lugar explican y describen a cada uno de los personajes. También te darán una concientización sobre el cuidado de la naturaleza.

En El Páramo de los Duendes hay alrededor de 50 ejemplares tallados a mano en madera, así como las casitas donde viven.

Una metáfora de la vida simple y natural

Páramo de los Duendes Huaquechula

En el Huerto de las Ánimas / Foto: Azucena Pacheco

Si hablamos de las raíces mitológicas de estos adorables personajes, se les podría encasillar como elementales. Esta clasificación incluye seres mágicos como hadas, troles, elfos o gnomos.

Una de sus misiones es ser guardianes que se encargan de proteger la naturaleza y que, como las leyendas los retratan, interactúan con los humanos, pudiendo llegar a hacerles travesuras.

El Páramo de los Duendes está abierto de viernes a domingo de 10:00 de la mañana a 7:00 de la noche. Tiene un costo de 20 pesos para niños y 40 pesos para adultos.

Por la temporada de Día de Muertos, estará abierto del 29 de octubre al 7 de noviembre hasta las 11:00 de la noche. Para programar tu visita nocturna mándales un mensaje por Facebook.

En el Huerto de las Ánimas: para comer sabroso

Páramo de los Duendes Huaquechula

Desayuno En el Huerto de las Ánimas / Foto: Azucena Pacheco

Justo a la entrada de El Páramo de los Duendes en Huaquechula, existe un lugar, también en medio del bosque, para probar antojitos regionales.

En el Huerto de las Ánimas es un restaurante de comida tradicional donde podrás degustar lo más típico de la gastronomía poblana y de Huaquechula: sopes, chanclas, chalupitas, tamales y otros platillos de la zona.

Todo acompañado por deliciosas aguas frescas de frutas, atoles ancestrales como el de amaranto o un buen café de olla.

Visitar altares en casas particulares

Páramo de los Duendes Huaquechula

Altar en domicilio particular / Foto: Azucena Pacheco

Tu última actividad en Huaquechula en este Día de Muertos debe ser visitar los altares monumentales que colocan en casas y plazas públicas. Aquí las ofrendas se montan de piso a suelo, con base de tela y sólo las colocan quienes perdieron un ser querido durante el año en curso.

Estos altares cuentan con tres niveles:

El primero representa el plano terrenal y en él se ponen guisos de la región, pan, fruta y bebidas, además de un espejo con dirección al techo de la ofrenda, en el cual se observa una fotografía del difunto como reflejo de su espíritu.

El segundo nivel simboliza la conexión entre la tierra y el cielo; lo representan con alguna imagen religiosa que intercede en el cielo por los difuntos.

El tercer nivel es el contacto con la divinidad, que en muchas ocasiones es representada con resplandores, ángeles, lloroncitos (una figura única de Huaquechula) o imágenes de Dios.

Si vas a visitar alguna ofrenda, debes llevar una veladora blanca como símbolo de humildad. Al mismo tiempo, ellos te invitarán a degustar algunas de las delicias que colocaron en la ofrenda.

Si quieres saber más sobre los elementos simbólicos presentes en los altares de muertos, pasa por aquí.