

Preparar huevos es un arte. Un arte muy subjetivo porque a cada persona le gustan de cierta forma y tienen sus pequeñas exigencias de acuerdo a sus gustos. Un poco más cocidos, suaves o simplemente unos huevos revueltos esponjosos son algunas de las opciones que cada persona espera en su plato. Estos últimos son un reto. Alcanzar la perfección y punto deseado de los huevos, requiere práctica y de muchos huevos pegados al sartén ¿y sabes qué? está bien. Eso es lo que hace a un buen cocinero, la práctica y la curiosidad.
Hemos visto mil y un formas de hacerlos: en batidora, con leche, elaborados en un sartén especial, etc. Pero en realidad, la técnica es muy sencilla y requiere de simplemente práctica y un poquito de maña.
Ahora ya tienes todo lo necesario para hacer unos huevos revueltos esponjosos y cremosos.