De un rato para acá, no podemos imaginar un desayuno o ‘brunch’ cumpleañero en el que falte su respectivo brindis con mimosas a la mano. Es una bebida elegante, coqueta y ligerita. Perfectos para romantizar un domingo por la mañana con las amigas.
La mimosa es una bebida sencilla, pero potente. Se trata de un cóctel preparado con jugo de naranja recién exprimido y champagne (aunque algunos también la preparan con vino espumoso, o específicamente con Prosecco)
Se ha convertido en una de las bebidas consentidas y favoritas de todo el mundo, pero ¿qué sabes de las mimosas, más allá de que son burbujeantes y deliciosas? Hoy te contaremos todo lo que tienes que saber de las mimosas.
Un poco de historia…
Una bebida que ha marcado la idea de los desayunos dominicales: la mimosa / Foto: Shutterstock
La historia de esta bebida tan querida está envuelta en una mezcla de tradiciones culturales y lugares emblemáticos que han contribuido a su popularidad.
Una de las versiones sobre su origen señala su nacimiento en el Buck’s Club de Londres a principios de los años 20, donde se preparaba una bebida llamada Buck’s Fizz, que consistía en una mezcla de jugo de naranja, champagne y vino blanco. Esta receta guarda similitudes con la actual mimosa y podría haber sido un precursor de esta refrescante combinación.
Sin embargo, la cultura de combinar vinos espumosos con jugos de frutas tiene raíces más profundas en la Ribera francesa, también conocida como Côte d’Azur o Costa Azul, donde esta práctica es parte integral de la gastronomía desde el siglo XIX. Aquí se encuentran otros cócteles similares, como el Bellini con pulpa de durazno, el Rossini con pulpa de fresa o el Tintoretto con jugo de granada, que forman parte de la rica tradición de bebidas refrescantes y festivas de la región.
Muchos adjudican su origen al Hotel Ritz de París
Muchos adjudican el origen oficial de las mimosas al Bar Heminway en le Ritz de París / Foto: Shutterstock
Una teoría ampliamente difundida sobre el origen de la mimosa sitúa su creación alrededor de 1925 al Bar Heminway en el Hotel Ritz de París, atribuyendo la invención al bartender francés Frank Meier. Según esta versión, la mimosa se elaboraba con partes iguales de champagne y jugo de naranja, creando así la combinación equilibrada y burbujeante que caracteriza a esta emblemática bebida.
Independientemente de su origen preciso, la mimosa ha trascendido fronteras y se ha convertido en un clásico atemporal, disfrutado en celebraciones, brunchs y ocasiones especiales en todo el mundo. Su sencillez, frescura y elegancia la han asegurado un lugar destacado en la historia de la coctelería, donde sigue siendo una opción irresistible para quienes buscan brindar con estilo y sofisticación.
Esta bebida tuvo tanto éxito que los buffets de hoteles estadounidenses sustituyeron el también famoso y mañanero bloody mary, -un coctel hecho con jugo de tomate, salsa Tabasco y vodka- por las mimosas.
Ahora, algunas cosas que seguro no sabías sobre la mimosa:
Detrás de esta bebida icónica se esconden algunos datos curiosos que pueden sorprender incluso a los conocedores más ávidos. Aquí hay algunas cosas que seguro no sabías sobre las mimosas:
Se llaman ‘mimosas’ por unas flores amarillas y esponjadas
El homónimo de las mimosas son unas flores amarillas que crecen al sur de Francia / Foto: Shutterstock
Anteriormente conocida como “Champagne Orange“, la bebida adoptó su nombre actual, “mimosa”, inspirado en las flores de mimosa (muy amarillas y esponjadas) que son comunes en el sur de Francia. Este cambio de nombre contribuyó a su identidad distintiva y su asociación con la frescura y la vitalidad.
La bebida favorita de la realeza
Las mimosas son de las bebidas favoritas de la realeza / Foto: Shutterstock
Las mimosas no solo eran apreciadas por las clases altas europeas, sino que también se convirtieron en un favorito de la realeza británica. Esta bebida era disfrutada como un aperitivo antes de la cena, añadiendo un toque de sofisticación a las reuniones y celebraciones.
Consentidas de Hitchcock
La popularidad de las mimosas trascendió fronteras y se extendió hasta Estados Unidos, donde personajes famosos como el cineasta británico Sir Alfred Hitchcock contribuyeron a su difusión. Durante los rodajes en los años 40, Hitchcock dio a conocer las mimosas entre las celebridades, contribuyendo así a su creciente fama en San Francisco, California.
Prepararlas es todo un arte de precisión
Para preparar mimosas se debe servir (a partes iguales) primero Champagne y luego jugo de naranja recién exprimido / Foto: Shutterstock
Según la recopilación de cócteles del Ritz de Paris de Peter Field, las mimosas tienen ciertas características distintivas que garantizan su calidad. Se recomienda prepararlas al momento, utilizando únicamente jugo de naranjas recién exprimidas y evitando agregar hielo para no diluir la bebida. Además, se sugiere verter primero el champagne y luego el jugo, sin revolver para preservar la efervescencia.
Sin lugar a dudas, hay una fascinante historia y sutilezas detrás de la mimosa, una bebida que ha perdurado a lo largo del tiempo como un símbolo de elegancia y frescura en la cultura gastronómica mundial.
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