
¡No tires el suero del yogurt que esta en tu refri! Aquí te cuento todo sobre su valor nutricional, su aporte y algunas maneras creativas de incluirlo en tu dieta.

El yogur ha tomado gran relevancia en los últimos años en el consumo de la alimentación diaria, si bien el consumo había estado presente, la realidad es que hoy en día este lácteo se ocupa como uno de los alimentos más funcionales por su aporte nutricional. Sin embargo, al abrir un envase de yogur natural o yogur griego, muchos se encuentran con una capa de líquido transparente del yogur y se preguntan:¿es seguro?, ¿debo tirarlo?.
La respuesta es un rotundo No. Ese líquido no es agua, sino suero de leche o lactosuero, y es una fuente concentrada de nutrientes esenciales. Lejos de ser un desecho, el suero del yogur es rico en proteínas de alto valor biológico, vitaminas y minerales, por lo que su consumo es altamente recomendado.
Ese líquido transparente es suero de leche. Aparece debido a un proceso natural conocido como sinéresis. Durante la fermentación del yogur, las bacterias lácticas convierten la lactosa en ácido láctico, lo que hace que las proteínas de la leche se coagulan y formen la textura espesa del yogur.
Con el tiempo, o debido a cambios de temperatura (como al abrirlo y volver a guardarlo en el refrigerador), esta red de proteínas puede contraerse ligeramente, liberando el agua atrapada y otros componentes solubles: el lactosuero. Su presencia es un signo de frescura y de un producto lácteo vivo, no de deterioro. Simplemente, mézclalo de nuevo con el yogur antes de consumir para incorporar sus nutrientes.

El valor del suero de leche del yogur reside principalmente en su composición. Contrario a lo que se piensa, el suero no es solo agua. Sus principales aportes son:
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