En un mundo donde ya nada sabe a lo que dice ser y la leche sabe a agua, los jugos a azúcar con un recuerdo a algo frutal, y el queso se derrite pero es insípido, se agradece que existan proyectos como Villa de Patos.
Villa de Patos nació del corazón de la familia Arizpe, que comenzó en Coahuila durante los años ochenta con Emilio y Sofía, quienes querían trabajar y recuperar la tierra de su abuelo. Así que se dieron a la tarea de rescatar las huertas utilizando técnicas sustentables y comprometidas con la conservación del medio ambiente.
Hoy en este proyecto no solo se recuperaron los nogales y membrillos de la zona, si no que apoyan a la economía local, a los pequeños productores que cultivan magueyes que ayudan a que el ecosistema de la zona de Coahuila se mantenga y recupere.
Uno de sus productos estrella, y del cual se siente orgullosa Ananda Arizpe, es el agua miel. Lo mejor es que con la producción del maguey se logra reforestar la zona, se capta más agua de lluvia y se impulsa la economía local de los pequeños productores de maguey.
Villa de Patos busca fomentar la ecología y economía local, pero aparte de eso mantiene un estándar de calidad que asegura que los productos están realmente sabrosos: los jugos de verdad tienen el sabor de la fruta que se indica, las nueces y dulce de membrillo son el fruto (literal) del trabajo de recuperar los árboles que plantaron los abuelos.
La leche sabe a leche ─¿realmente hace cuánto no prueban una leche que sepa a lo que es?─ y tiene la ventaja de que se pasteuriza en frío, un proceso que evita que se pierden los Omegas 3 (las grasas buenas que ayudan a reducir el colesterol)que normalmente se desnaturalizan con la pasteurización. Así, la leche producida por Villa de Patos no solo es de vacas libres de hormonas, antibióticos y de libre pastoreo que ya de por si dan leche de calidad, sino que la tecnología que usan hace aún más sano el lácteo.
El ganado de Villa de Patos es de libre pastore por lo que su leche tiene mejor sabor, así como los productos lácteos derivados. // Foto: Cortesía Villa de Patos.
Y si hablamos de los quesos lo único que podemos decir es: carácter. Estos quesos tienen carácter y un sabor increíble; será que son una debilidad para nosotros, pero ¡qué cosa los quesos!
El agua miel, así como los jugos y la leche pasan por un proceso en frío de alta presión, que conserva los nutrientes de los alimentos y mata todas las bacterias nocivas. Este sistema genera una presión equivalente a sumergir los productos a 60 kilómetros de profundidad en el mar (si existiera dicha profundidad) y lo mejor de este proceso es que deja un producto sin patógenos y el sabor es indiscutiblemente mejor.
Leche que sabe a leche, no a pintura diluida, jugos de fruta que parece que la estas mordiendo, quesos que se derriten y que desbordan sabor. Villa de Patos es un proyecto de amor y respeto a los ingredientes procesados con tecnología, en armonía con el campo. Sí, nos enamoramos de sus productos.
Para que ustedes también se enamoren, y comprueben que no estamos locos, pueden probar los productos en:
Villa de Patos
Sitio web: www.villadepatos.com
Twitter: @villadepatosMX
Facebook: /productosdelcampo
Monterrey Plaza 100
Avenida Manuel Gómez Morín 100, Local N108, esquina con Roberto Garza Sada, colonia Carrizalejo. San Pedro Garza García, NL.
Teléfono: 81 83381379
Contacto: [email protected]
Saltillo
Boulevard José Musa 2665, local 1, colonia Valle Real. Saltillo, Coahuila.
Teléfono: 844 4856806
Los Portales
Juan Antonio de la Fuente, colonia Centro. General Cepeda, Coahuila.
Teléfono: 842 4250060
Mercado Roma
Querétaro 225, local 11, entre Monterrey y Medellín, colonia Roma. Ciudad de México, DF.
Teléfono: 55 55643275
Contacto: [email protected]
Marché Dumas
Alejandro Dumas 125, pasando avenida Mazaryk, colonia Polanco. México, DF.
