Las mascarillas naturales son muy populares y efectivas. Nada como utilizar lo que nos regala la naturaleza y que podemos encontrar en nuestra casa para nutrir y cuidar el cuerpo.
Hay que saber qué funciona mejor para el tipo de piel de cada persona, además, el precio de un buen cutis puede ser muy económico si conviertes estos remedios en hábitos de limpieza. Es decir, la piel también come.
Comencemos a darle de comer a la cara con algunas buenas opciones. En el caso de frutas y verduras, hay que lavarlas como si las fuéramos a comer, porque al final las absorbe nuestra piel. Si son fresas por ejemplo, también debemos desinfectarlas y, de preferencia, aplicar sin hambre.
De aguacate (para piel seca)
Si tu cutis es graso debes evitar la mascarilla de aguacate. // Foto: Especial
Esta mascarilla ha dado los mejores resultados e inmediatos pero si la de piel es grasa, o con acné, hay que evitarla porque es muy grasosa.
- ¼ de aguacate (que no esté nada oxidado para que conserve sus nutrientes)
- 1 cucharadita de aceite de almendras o aceite de oliva (opcional)
Mezclar los ingredientes y aplicar en cara y cuello. El aguacate tiene vitamina E y antioxidantes. Se deja en la piel por quince minutos y se enjuaga con una toallita húmeda. De preferencia se aplica por la noche y máximo dos veces por semana.
Cleopatra (para eliminar impurezas)
Esta receta es muy fácil y efectiva. Se necesita:
- 1 cucharada de leche tibia (de preferencia entera)
- 1 cucharadita de grenetina en polvo.
Mezclar los ingredientes hasta formar una pasta, aplicarla y dejar secar. Después de diez minutos retirarla. No es necesario enjuagarla, sólo desprenderla, como si fuera pegamento blanco ya seco. Utilizarla una o dos veces por semana.
De azúcar y limón (astringente)
El limón libera las células muertas y aclara los poros, aunque esta mascarilla también es efectiva para manchitas o cicatrices y se puede usar en cara y cuerpo.
- 1 cucharada de azúcar (blanca o morena)
- 1/2 limón
Exprimir el limón en el azúcar hasta que se haga una pasta y no quede líquido. Aplicarla en círculos, dejar secar y mantenerla por 10 minutos.
Retirarla con una toallita húmeda. Inmediatamente sentirás tu piel suave por la exfoliación.
OJO: Hay que usarla en la noche porque el limón mancha la piel al exponerlo con el sol y aunque se enjuague bien pueden quedar residuos.
De papa (para las manchas en la piel)
Además de manchas, pecas y paño, también es buena para las arrugas. Se necesita:
- 1 cucharada de leche en polvo
- 1 cucharada de miel de abeja
- 1 cucharada de papa cruda rayada
La leche es un buen aclarador natural además de que es rica en proteínas; la miel contiene minerales y aminoácidos que son excelentes para la piel y la papa tiene muchas vitaminas y potasio.
Se mezclan los ingredientes, se aplicar y deja por 20 minutos. Retirar con una toalla húmeda. Se recomienda de noche y no más de dos veces por semana.
De huevo (para las arrugas)
Esta es de las más potentes y efectivas. La puedes usar para prevenir o disminuir las arrugas existentes y es perfecta para cualquier tipo de piel. También ayuda a eliminar el brillo y puntos negros.
- 1 clara de huevo
- 1 cucharadita de aceite de oliva o almendras (opción sólo para piel seca)
Sólo hay que batir el huevo para que la aplicación sea más fácil y dejarla quince minutos. A los cinco minutos de aplicada sentirás la piel muy estiradA. Es como un lifting, no se puede ni hablar, lo cual muestra lo efectiva que es.
Se retira igual con toallita húmeda. La recomendamos de noche y máximo una vez a la semana.
De yogurt (rejuvenecedora)
- 1 cucharada de yogurt natural
- 1 cucharada de avena
- Gotitas de miel de abejas
Mezclar bien los ingredientes, colocarla la mezcla sobre la piel y dejarla entre 10 y 20 minutos. El yogurt hidrata la piel y la avena es un gran exfoliante. La miel ayuda para la piel muerta. Retirar con toallita húmeda, los resultados también son inmediatos. Hacerlo una o dos veces por semana.
Otros ingredientes para todo tipo de piel
Recuerda desinfectar las fresas como si fueras a comerlas. // Foto: Especial.
- Miel: La mejor amiga de la piel. Es regeneradora, ayuda contra el acné, arrugas, cicatrices y piel caída. No importa la edad ni el tipo de piel, la miel es muy recomendable y nada agresiva.
- Agua mineral: Puedes colocarla en un atomizador y refrescarte las veces que quieras, es excelente humectante.
- Fresas: Una de las favoritas. La recomendamos sólo en ocasiones especiales pues su efecto es tan bueno que no quieres que la piel se acostumbre y que se deje de notar su magia. Desinféctalas muy bien, tritúralas y después puedes agregarles un chorrito de miel o de aceite de oliva. Déjala reposar por 15 minutos y enjuaga con agua.
