Sabemos que empezar un régimen alimenticio representa, en muchas ocasiones, una inversión mayor en ingredientes y productos “de dieta“; sin embargo, eso no quiere decir que hay que gastar mucho o abortar la misión a la hora de querer comer bien.
Muchas veces, los productos que prometen ese cuerpo escultural con el que sueñas tienen un gran plan de mercadotecnia detrás y a todos hacen creer que es esencial pagar cantidades ridículas por ellos.
Y no hay nada más lejano a la realidad que eso. Aunque no lo creas, una dieta correcta, equilibrada, higiénica y saludable que sí te ayudará a cumplir tus objetivos puede hacerse con un gasto mucho menor del que representan los superalimentos y los suplementos.
Como siempre, el primer tip para ponerse a dieta correctamente y asegurarse que tendrá resultados es consultar a un especialista.
Nutriólogos hay de todos los estilos: los que apelan a los superalimentos, los que recomiendan productos orgánicos, los que motivan la dieta keto o el fasting y otros que recurren a modelos clásicos de alimentación.
Cada estilo de dieta representará costos distintos. Si decides comprar todo orgánico ahora que estás queriendo comer bien, es evidente que vas a gastar mucho más; si decides irte por regímenes plant-based como la dieta de la milpa que aprovecha los ingredientes de temporada, será mucho más económico.
Repetimos, comunícate con tu nutriólogo primero.
Recuerda que una buena dieta incluye proteínas, verduras, frutas, algunos cereales y por supuesto agua. También es recomendable que hagas por lo menos una hora de ejercicio.
Si ya fuiste a consuta y al ver tu dieta consideras que hay ciertos productos que pueden ser difíciles de costear, pregunta cómo se pueden sustituir. La naturaleza es multidiversa así que seguro hay alguna alternativa ideal para tu bolsillo.
No gastes de más, antes de ir al súper checa qué tienes en tu refrigerador; quizá haya cosas que pueden funcionar para tu dieta. Hay modelos nutricionales que marcan cantidades y raciones exactas por comidas, esto es maravilloso cuando calculas cuánto comprar.
No creas todo lo que dice la publicidad. En muchas ocasiones, ese queso light será menos saludable que el regular aunque tenga más grasa y con un buen equilibrio entre alimentación y ejercicio, hasta lo aprovechará mejor tu cuerpo.
Te recomendamos no recurrir a las pastillas que aceleran el metabolismo o a suplementos que prometen cosas que definitivamente no te van a cumplir.
Este tip tiene truco: los alimentos ultraprocesados suelen ser más baratos porque se fabrican con materia prima de baja calidad y muchos químicos que intentan sustituir a los nutrientes naturales así que seguramente eliminarlos represente una alza en tu cheque promedio del súper semanal.
Pero hay formas de reducirlo: opta por lo de temporada, eso que está más barato que los demás y justo en su punto.
Comprar leche de a deveras puede ser más económico si aprendes a aprovecharla en su totalidad antes de que se eche a perder. Experimenta cocinar con los ingredientes que tengas para no desperdiciar nada y hacer rendir el mandado lo más posible.
En muchos mercados o tianguis de la CDMX existen pasillos que llenan de colores y sabores las bolsas de mandado.
Una de las recomendaciones es que aproveches al máximo las ofertas que hay, normalmente puedes llevarte gran cantidad de frutas y verduras y pagar muy poco.
Si acudes a los mercados sobre ruedas o centrales de abasto el gasto será aún menor y además te aseguras de que el producto está fresquito y te va a durar mucho tiempo.
Cuando comiences con tu régimen alimenticio tendrás que planear todo durante ese periodo. Puedes crear menús por semana y en función de eso hacer las compras para no gastar de más ni romper la dieta con antojitos que están fuera de las reglas.
Te recomendamos que pidas ayuda para diseñar qué comer durante el desayuno, entre comidas, comida y cenas.
Además de ayudar a planeta por no consumir plástico de un solo uso, aprovechar esos maravillosos puestos de secos de los mercados o tiendas a granel podría disminuir los costos que tienes para planear tu dieta.
Una enorme ventaja de los ingredientes que encuentras es que son muy rendidores y saludables. Además, son muy fáciles de conservar, aquí te dejamos algunos tips para hacerlo.
Hacer una dieta implica mucho sacrificio, paciencia y dedicación. Una de las recomendaciones es que raciones tu comida, así tendrás para toda la semana esto evitará que compres cosas que no necesitas.
Una de las tendencias más queridas por las personas que están invirtiendo su tiempo en la cocina son los pequeños huertos en casa; son muy sencillos de poner y cuidar.
También existe la posibilidad de que vuelvas a cosechar verduras que ya ocupaste. Aquí te decimos cómo hacerlo.
Actualmente existen productores que se dedican a la venta de alimentos orgánicos de buena calidad. Muchos de ellos tienen ofertas y opciones para abastecer los refrigeradores de las personas a buen precio.
Uno de los tips que te damos es que aproveches estas oportunidades, así podrás comer bien y fresco sin gastar toda la quincena.
Entre comidas puedes optar por preparar ricos snacks que no te cuesten mucho dinero. Las verduras son de consumo fácil y suelen ser muy baratas.
Te recomendamos que en tu refrigerador tengas pepinos, jícamas y zanahorias. Puedes rallarlas y meterlas en bolsas herméticas o envases y acompañarlas de una salsa de chamoy increíble.
Para mantenerte saludable y bien hidratado debes consumir como mínimo ocho vasos de agua, lo que es equivalente a dos litros diarios. No es tan sencillo, tomar una bebida insípida es aburrido e incluso monótono así que facilítate el trabajo y prepara sueros orales, infusiones o aguas frescas con frutas de temporada sin azúcar.
Si la intención es economizar en gastos de garrafones o botellas, mejor purifica el agua de la llave en casa.
Otra forma de economizar en la dieta es variarle a la proteína; hay muchos alimentos que pueden funcionar en lugar de ese corte carísimo como las alternativas vegetales.